Esta mañana temprano he podido estrenar mis zapatillas de trail, aprovechando la temperatura de la mañana me calce las zapatillas, mi música y salí a disfrutar de la naturaleza. Las sensaciones han sido magnificas, poder recorrer 8 km en diferentes terrenos, subiendo a una altura máxima de 829 metros en la serranía manchega, disfrutando de paisajes maravillosos, disfrutando del silencio, tener el privilegio de sentirse uno mas del entorno, poder cruzarse con algún que otro conejo, y con nada mas, ni coches, ni otros corredores, y sobre todo no tener que estar pendiente de por donde cruzar o dando vueltas al mismo recorrido.
Hoy el camino era diferente, difícil y único.
Tenía que estar concentrado en donde pisas teniendo cuidado que ninguna piedra cediera, dosificando las subidas y disfrutando las bajadas y llegar al final del trayecto y disfrutar de las vistas maravillosas aportandome tranquilidad, desconexión y sobre todo silencio, ese que necesitas cuando llevas mucho tiempo con tantas cosas en la cabeza.
Hoy empezé la mañana como nunca,fresco. Y terminé lleno de energía, con de ganas de volver a coger las zapatillas y disfrutar de la naturaleza.

Aquí os dejo algunas fotos de esta mañana.